La 5-hidroxitriptamina funciona como neurotransmisor (sustancia que usan los nervios para enviarse mensajes entre sí) y vasoconstrictor (sustancia que hace que los vasos sanguíneos se estrechen). Se cree que una concentración baja de 5-hidroxitriptamina es causa de depresión. También se llama 5-HT y serotonina.
En el sistema nervioso central, la serotonina juega un papel fundamental en la modulación del estado de ánimo y el comportamiento, la memoria y el aprendizaje, la regulación del sueño y la función sexual, entre otras funciones. La interrupción del equilibrio de la serotonina en el cerebro se ha relacionado con una variedad de trastornos neuropsiquiátricos, incluyendo la depresión, el trastorno de ansiedad, el trastorno obsesivo-compulsivo y la esquizofrenia.
En el tracto gastrointestinal, la serotonina ayuda a regular el movimiento del intestino y la función del sistema digestivo. Aproximadamente el 90% de la serotonina del cuerpo se encuentra en el intestino, donde se libera en respuesta a la ingesta de alimentos y ayuda a estimular las contracciones musculares que impulsan la digestión.
En la sangre, la serotonina se almacena en las plaquetas, células que participan en la coagulación sanguínea. Cuando se produce una lesión y las plaquetas se agregan para formar un coágulo, liberan serotonina, lo que ayuda a reducir el flujo de sangre al área de la lesión y promueve la formación de coágulos.
La serotonina se produce a partir del aminoácido triptófano, que se encuentra en muchos alimentos ricos en proteínas. Una vez que el triptófano se ingiere y se absorbe en el cuerpo, se convierte en 5-hidroxitriptófano (5-HTP) por una enzima llamada triptófano hidroxilasa. El 5-HTP se convierte posteriormente en serotonina por la acción de otra enzima, la descarboxilasa de aminoácidos aromáticos.
El sistema serotoninérgico, que incluye la serotonina y sus receptores, es un objetivo importante para una variedad de medicamentos utilizados para tratar trastornos neuropsiquiátricos. Los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS), por ejemplo, son una clase de antidepresivos que funcionan bloqueando la recaptación de serotonina en las neuronas, lo que aumenta la disponibilidad de serotonina en el espacio sináptico y potencia su acción. Otros medicamentos, como los triptanes utilizados para tratar la migraña, actúan estimulando los receptores de serotonina para producir efectos terapéuticos.